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Peter Meyer, reconocido representante de Hollywood que trabajó con estrellas como Tom Hanks y Kevin Costner, falleció a los 68 años tras una valiente lucha de cinco años contra el sarcoma. Más que un gestor de carreras, fue un mentor y confidente respetado por su integridad, calidez y profunda creencia en el poder de las historias. Su influencia trascendió los negocios y dejó una huella duradera en la industria. Su servicio memorial se celebrará el 13 de junio en Santa Mónica.
Mientras Hollywood honra su legado, Kevin Costner vuelve a ser noticia por una decisión profesional muy personal. En medio de su proceso de divorcio, el actor ha invertido alrededor de 50 millones de dólares —incluso hipotecando propiedades— en Horizon, una ambiciosa serie de películas del oeste. El proyecto refleja su amor por el género y su deseo de crear historias auténticas y perdurables.
Ambas historias revelan el lado humano de Hollywood: pérdida, riesgo creativo y resiliencia. El legado de Meyer y la determinación de Costner recuerdan que detrás del éxito hay convicción, pasión y propósito.
