Cada día, millones de fotos se suben a internet: selfies, paisajes, recuerdos de viaje. La mayoría se olvida en segundos. Pero de vez en cuando, una imagen destaca. No por su belleza. No por lo evidente. Sino por lo que aparece cuando miras más de cerca: algo inquietante, algo que no debería estar allí.
Recientemente, una fotografía tomada por un grupo de exploradores urbanos se volvió viral por esa misma razón. Estos jóvenes se habían adentrado en unas antiguas instalaciones militares abandonadas desde hacía más de veinte años. Todo estaba cubierto de polvo, con ventanas rotas y una atmósfera pesada, apenas iluminada por la luz natural que se colaba por el techo. Tomaron decenas de fotos sin notar nada extraño… hasta que las revisaron esa noche.
Y fue entonces cuando lo vieron.
En una de las imágenes, tomada en un pasillo oscuro, el reflejo en una ventana mostraba algo que ninguno recordaba haber visto: una figura. No estaba en el pasillo. No estaba detrás del fotógrafo. Solo aparecía en el cristal. Y miraba directamente a la cámara.
Al principio parecía humana. Pero al hacer zoom, los detalles se volvían más inquietantes: extremidades demasiado largas, postura antinatural, cabeza inclinada. Lo peor era el “rostro”. O la ausencia de él. No tenía ojos, ni boca. Solo una distorsión borrosa. No era solo una figura. Estaba consciente.
Las reacciones en línea fueron inmediatas. La imagen se difundió por Reddit, Discord y foros paranormales en cuestión de horas. Algunos intentaron desacreditarla —distorsión óptica, reflejo, un montaje. Pero expertos analizaron el archivo original y no encontraron rastros de edición, exposición doble ni manipulación. El ángulo del reflejo no tenía sentido físico. Y la hora coincidía exactamente con el momento en que el grupo pasó por ese lugar.
“Yo no sé qué es eso”, escribió un usuario, “pero también me miró a mí.”
Desde que apareció la foto, hay quienes afirman haber tenido pesadillas, incomodidad al mirarse en espejos y la espeluznante sensación de ser observados. Uno de los exploradores confesó de forma anónima: “Solo era una foto. Pero desde que vimos el reflejo… no podemos dormir. Ninguno quiere volver allí.”
A veces, una foto captura un instante. Otras veces, un misterio. Pero rara vez… parece que la foto te está mirando a ti.
¿Te atreves a mirar?
Solo recuerda: puede que ya te esté mirando.