Una fotografía de Tammy Hembrow amamantando a su bebé durante unas vacaciones en Bali desató una ola de comentarios inapropiados y sexualizados por parte de trolls en redes sociales.
Aunque muchos seguidores elogiaron su valentía por mostrar la lactancia de manera natural, otros usuarios hicieron comentarios ofensivos como “qué pechos tan hermosos” o “ojalá fuera ese bebé”. Algunos incluso la criticaron por publicar una imagen que, según ellos, “atrae miradas indebidas”.
Tammy no ha respondido directamente a las críticas, pero numerosos fans salieron en su defensa, destacando que la lactancia materna es un acto natural que no debe ser sexualizado ni motivo de vergüenza.
El episodio evidencia la presión y el escrutinio que enfrentan las madres que comparten abiertamente su experiencia de amamantar en público o en redes sociales, y reaviva el debate sobre el respeto, la normalización y la libertad de las mujeres para mostrar la maternidad sin prejuicios.