North West, hija de Kim Kardashian y Kanye West, vuelve a generar debate por sus elecciones de moda, consideradas por muchos “demasiado adultas” para sus 12 años. Durante apariciones recientes en Roma y el Festival de Cine de Venecia, lució corsés, minifaldas, botas de plataforma y peinados teñidos, lo que dividió opiniones: algunos celebran su estilo propio, otros critican la falta de límites adecuados para su edad.
Expertos advierten que, en plena formación de identidad, la forma de vestir influye en cómo un niño se percibe y es percibido. Mientras unos defienden su derecho a experimentar, otros cuestionan la responsabilidad de los adultos en proteger su inocencia y desarrollo emocional.
El caso subraya la tensión entre creatividad infantil y exposición mediática, recordando que la crítica debe dirigirse a las decisiones parentales, no a una menor que aún construye su personalidad.